El Consejo de Proximidad no cumple las expectativas

El 30 de marzo pasado se llevó a cabo el Consejo de Proximidad del distrito de Carabanchel. Después de la realización del último pleno, la percepción es que definitivamente no supera las expectativas. Lo constata el hecho de que de las nueve mesas posibles solo se han instalado tres, y de ellas únicamente se presentaron dos. Si a esto le sumamos que la asistencia de vecinos fue nula, estaríamos hablando de un divorcio entre los vecinos y sus instituciones, y en tales circunstancias es posible que las medidas tomadas, al no ser concertadas, no sirvan de mucho.

Si bien es cierto que se han cruzado problemas como la pandemia, tenemos razones para pensar que no se han activado todos los mecanismos de información masiva, o si los hay no han sido los oportunos, para que el Consejo de Proximidad de Carabanchel sea el lugar adecuado donde los vecinos se encuentren a discutir y solucionar sus problemas. Y esto mueve a suponer que las decisiones que se toman dentro de las mesas no están avaladas por la ciudadanía, sino por los mismos integrantes de las mesas.

En el informe por parte del presidente del Consejo de Proximidad se habla de intervenciones en el ámbito económico, educativo, de vivienda, cultural, deportivo, familiar e individual en términos generales, dando la sensación de que todo fue aprobado por las dos comisiones activas, así lo actuado tenga que ver con cultura u otras especialidades en las que deberían estar involucradas las otras áreas que no se han constituido. Pero no se ve la participación ciudadana. Prueba de ello es que en este pleno no se debatió ninguna proposición, según las directivas, porque los servicios jurídicos aún no daban el visto bueno a las presentadas. Y como si fuera poco, no había nuevas propuestas.

Creemos que ante la actual situación económica y social que se ve venir a cuenta de la persistente pandemia y la guerra en Ucrania, con una subida generalizada de los precios de los combustibles y por ende de los productos de primera necesidad (agentes generadores de malestar social), es urgente la reactivación de este organismo que se ha hecho para que sean las comunidades las que ayuden a identificar las necesidades básicas y juntos discutir las soluciones más apropiadas. Se debe, si realmente hay voluntad política de que la ciudadanía sea la gestora de las soluciones de sus propias necesidades, activar ya un mecanismo de información y concienciación dirigido a todos los vecinos y vecinas de Carabanchel, dando a conocer las herramientas con que cuenta para organizarse y trabajar en pro de su propio desarrollo personal y social.


  Votar:  
Resultado:5 puntos5 puntos5 puntos5 puntos5 puntos
  1 voto