Calle General Ricardos
Calle General Ricardos

Historia de Carabanchel. El siglo XX [3]: El Franquismo

Como veíamos en el capítulo anterior, la guerra deja en los Carabancheles un paisaje desolado, el de después de una batalla. Para completar el panorama, llegan tiempos durísimos, de hambre, racionamiento y represión bajo la bota de una dictadura sangrienta. Los abuelos del barrio aún recuerdan el ruido de las descargas de fusilería por las noches, que llega de las tapias del cementerio. Es el régimen, que elimina a la España que le sobra.

La mitad de los edificios están destruidos, y Carabanchel es incluido en el grupo de “Pueblos Adoptados”, con los que accede a condiciones más favorables de reconstrucción y que llevó a cabo la Dirección General de Regiones Devastadas durante los años 40. Entre sus principales intervenciones se contaron la reconstrucción de edificios religiosos (como el seminario de los Salesianos, el convento de las Hermanas Clarisas de Constantinopla, el de las Religiosas Oblatas, la iglesia de San Sebastián Mártir o la iglesia y convento del Santo Ángel de la Guarda) y la construcción o reconstrucción de edificios sociales (reconstrucción del colegio “La Unión”, construcción del centro de discapacitados “Magerit”, la escuela “Nuestra Señora del Carmen”, el asilo “Santa Rita”, el reformatorio “Sagrado Corazón”, el grupo escolar “Benito Prieto” o el asilo “Divina Infanta”).

Ante la urgente demanda de alojamiento, Regiones Devastadas promovió también la Colonia Tercio y Terol, poblado de 640 viviendas unifamiliares en hilera y de marcado carácter rural, con las manzanas introvertidas para posibilitar la inclusión de patios. Su ejecución se realizó entre 1942 y 1951. Asimismo, esta dirección general construyó dos edificios emblemáticos en el Bajo: las escuelas (1944) y el mercado (1945).

La cárcel


[caption id="attachment_6948" align="aligncenter" width="620"]Inauguracio?n ca?rcel de Carabanchel Inauguracio?n ca?rcel de Carabanchel[/caption]

El régimen decidió levantar una nueva cárcel, y a tal efecto, el 16 de enero de 1940 se adquirieron unos terrenos de unos 200.000 metros cuadrados en el municipio de Carabanchel Alto, pertenecientes a José Messía y Stuart, duque de Tamames y de Galisteo. En total, el Estado pagó unas 700.000 pesetas. Las obras empezaron el 20 de abril de 1940, y la cárcel se inauguró el 22 de junio de 1944.

 

También por esta época, el 5 de junio de 1946, el hospital militar recibe el nombre de “Gómez Ulla”, en honor del general médico Mariano Gómez Ulla, cirujano militar fallecido el 24 de noviembre de 1945. Otro de los “iconos” del barrio, la plaza de toros de Vista Alegre, destruida durante la Guerra Civil, fue reconstruida en el año 1944, quedando inconclusa, de ahí el nombre de "La Chata" con el que fue conocida a partir de entonces. La plaza fue inaugurada de nuevo el 18 de julio de 1947.

[caption id="attachment_6949" align="aligncenter" width="620"]Presos con sus familias durante la construccio?n de la Ca?rcel de Carabanchel Presos con sus familias durante la construccio?n de la Ca?rcel de Carabanchel[/caption]

1948: anexión a Madrid


El 29 de abril de 1948, los términos municipales de Carabanchel Bajo y Carabanchel Alto se incorporan a Madrid. Fue el primer paso de un proceso que se desarrolló entre 1947 y 1954, y por el cual Madrid se anexionó 13 municipios limítrofes: Carabanchel Alto, Carabanchel Bajo, Chamartín de la Rosa, Canillas, Canillejas, Hortaleza, Barajas, Vallecas, El Pardo, Vicálvaro, Fuencarral, Aravaca y Villaverde, por este orden.



El objetivo era crear el “Gran Madrid”, una capital con población y extensión similar a las capitales europeas, mediante la anexión de los municipios cercanos a la capital. De esta forma, el 3 de septiembre de 1947, el último alcalde de Carabanchel Alto, Rafael López Izquierdo, presenta las bases de la anexión con las siguientes palabras: “El planteamiento de esta cuestión actualmente es necesario para resolver un problema ya iniciado con anterioridad, como es el del inevitable y progresivo crecimiento de los grandes núcleos urbanos, que hacía preciso buscar las fórmulas adecuadas para establecer accesos convenientes, resolver la situación de los suburbios y tender, en fin, a la formación del Gran Madrid. La intervención del Estado en cuestión que tanto afecta al decoro y prestigio de la capital demuestra que es un asunto que rebasa la esfera municipal o local para entrar en el ámbito de los intereses nacionales”. De forma similar se produce la anexión de Carabanchel Bajo, y así, el 9 de enero de 1948, se publica el decreto del Ministerio de Gobernación en el que se autorizaba la anexión de los Carabancheles. El 12 de febrero de ese mismo año se aprueban las bases de la anexión, que finalmente se lleva a cabo en la citada fecha. Posteriormente, el 8 de junio, Carabanchel Bajo y Carabanchel Alto se unifican dentro del municipio de Madrid formando el distrito de Carabanchel, con sede en el antiguo consistorio de Carabanchel Bajo.

[caption id="attachment_6952" align="aligncenter" width="830"]Bando sobre la anexio?n de Carabanchel Bajo a la ciudad de Madrid Bando sobre la anexio?n de Carabanchel Bajo a la ciudad de Madrid[/caption]

Siguen las construcciones y reconstrucciones


La Colonia San Vicente de Paúl, situada en una cuña verde muy amplia con vértice en la Glorieta Elíptica y entre la avenida de Oporto - avenida de Abrantes y la calle Via Lusitana, está integrada en la fachada sureste de Carabanchel según trazado de 1949 de la Comisaría de Urbanismo. Se construyó entre 1950 y 1959.

La calle General Ricardos, que quedó muy destruida tras la Guerra Civil, estaba considerada como la segunda columna vertebral de Carabanchel después del paseo de Extremadura. Tras la Guerra Civil, se emprendió un plan especial sobre dicha calle con intervenciones puntuales y dispersas de reconstrucción y regeneración sobre los vestigios de la guerra, con el objetivo de que se convirtiera en la gran avenida del sur de Madrid. A la sazón, la acción planificadora abordaría el eje vial desde el puente de Toledo hasta los confines de Carabanchel Bajo, más zonas “marginales” como el barrio de las Pavas y la colonia Tercio y Terol.

 

Calle General Ricardos

A finales de los 50, la convocatoria de un certamen de “vivienda experimental” concentra en España las políticas públicas en materia de vivienda y urbanismo en tareas de urgente realojamiento de poblaciones suburbanas marginales y de escasos medios bajo cierto espíritu aperturista, con la concurrente colaboración de empresas y de los mejores arquitectos del momento, provocando uno de los más acelerados pasos en el diseño del alojamiento de masas. En la colonia Puerta Bonita se planifica un amplio sector que en gran parte subsiste y del que conservamos un pequeño rosario exponente de las “viviendas en cadena” de Miguel Fisac.

Segunda oleada migratoria con el desarrollismo


Tras la autarquía y el Plan de Estabilización de 1959 empieza un periodo de desarrollo, y hay un éxodo muy importante de población del campo a las ciudades en busca de nuevas oportunidades. Carabanchel es uno de los principales focos de atracción de toda España. Es junto con Vallecas el que más población recibe de todos los distritos de Madrid, siendo la capital la que más población recibe de todas las ciudades españolas. Su proximidad a Madrid y su rápida comunicación con ella a través de los nuevos medios son fundamentales para que la población se asiente en Carabanchel.

La mayoría de dicha población procedía de Castilla la Nueva, Castilla la Vieja, Andalucía y Extremadura. Principalmente se asentó en la zona del antiguo municipio de Carabanchel Bajo, debido a la cercanía con el centro y a su mejor comunicación que el Alto. Este éxodo da lugar a un serio problema de vivienda, y es que la llegada de tantísima población con pocos recursos y mucha ilusión supuso la proliferación de suburbios y barriadas en las que se hacinaba la gente y las condiciones de vida eran poco dignas. Así, proliferan bolsas de deterioro urbano debido al envejecimiento del parque inmobiliario, y sobre todo grandes núcleos chabolistas que crecen en determinadas zonas como el barrio de San Isidro, un amplio descampado a ambos lados de la carretera de Toledo entre Plaza Elíptica y el término de Leganés, y el barrio de Pan Bendito. Para intentar solucionar el problema, el Gobierno construyó bastante vivienda protegida, con colonias como las de Vista Alegre, Pan Bendito, Virgen de Loyola, Juan XXIII, etc.

La avalancha tan brutal de población en tan corto espacio de tiempo provocó también una evidente falta de dotaciones y equipamientos. Por aquel tiempo un informe municipal sobre este asunto hablaba de falta de mercados (hay dos, el de Carabanchel y el de San Isidro, insuficientes para atender la demanda), equipamientos comerciales de nivel medio y dotaciones culturales deficitarias para una población juvenil en crecimiento. Respecto a las zonas verdes, la situación no era mala: Carabanchel contaba con un parque de reciente creación y en proceso de crecimiento y expansión, el Parque Sur, y con el parque de San Isidro, aunque los vecinos reclaman otros parques prometidos desde hacía años. En cuanto a las dotaciones sanitarias, la demanda estaba satisfactoriamente cubierta con los ambulatorios y consultorios de la Seguridad Social y el equipo quirúrgico de la calle General Ricardos, que hacía de único centro de asistencia de Urgencias. Ya entonces se reclama la integración del hospital militar en la red sanitaria pública. Otros déficits apuntados eran la falta de locales de ancianos, ya que la población estaba en proceso de envejecimiento, y la falta de equipamientos deportivos. Carabanchel solo contaba con el de la avenida General Fanjul, llamado “Polideportivo de Carabanchel” (en la actualidad es el Polideportivo de Aluche y pertenece al distrito de Latina). El informe termina con un dictamen demoledor: “Desde su anexión, Carabanchel se ha convertido en el segundo distrito más poblado de la capital, donde la saturación circulatoria, la densidad poblacional y los problemas de cada día lo hacen problemático y difícil”.

[caption id="attachment_6953" align="aligncenter" width="620"]Calle General Ricardos en la postguerra Calle General Ricardos en la postguerra[/caption]

El Ayuntamiento redacta un nuevo Plan General de Ordenación Urbana, el de 1963, en el que la ciudad queda dividida en la almendra central y nueve distritos. Un año después, en 1964, y como consecuencia del desarrollo del nuevo Plan General, se elabora el Plan Parcial de Carabanchel Alto, en el que las previsiones de crecimiento son menores, con el ánimo de poner freno al incontrolado crecimiento que se ha venido produciendo desde su anexión. Este Plan Parcial hace una serie de previsiones viarias, pero la única que se llega a realizar es el trazado de la avenida de los Poblados como un vial de conexión de barrios periféricos y especie de anillo de circunvalación. Pese a las restricciones del plan, el Distrito ha seguido creciendo.

En 1971 se lleva a cabo una nueva reorganización territorial. Carabanchel es dividido en tres distritos: Latina, Carabanchel y Usera. En esta división, Carabanchel ve reducida su extensión a menos de la mitad de lo que llegó a ser. Hasta 1971 ocupaba prácticamente todo el sur de Madrid, a excepción de Villaverde y Vallecas. Para la creación del distrito de Latina, Carabanchel pierde barrios como Aluche, Campamento, Cuatro Vientos o Empalme. Usera se forma con parte de los territorios de Carabanchel y Villaverde.

(Continuará)

[box type="info" align="aligncenter" ]

Fuente:

https://es.wikipedia.org

[/box]

 

 


  Votar:  
Resultado:2 puntos2 puntos2 puntos2 puntos2 puntos
  3 votos