El Gobierno nacional impuso el uso obligatorio de la mascarilla a partir del jueves pasado en los exteriores de toda España. Se tendrá que llevarla en interiores y el trasporte público. La medida también impone restricciones a las reuniones a un máximo de 10 personas y la distancia de seguridad de un metro y medio de distancia. Se ha hecho especial recomendación a evitar aglomeraciones innecesarias para esta navidad y festividades de fin y comienzo de año.
La mascarilla obligatoria vuelve después de que el 90% de los españoles están vacunados contra la COVI-19 con la pauta completa, pero que la llamada sexta ola, con la variante Ómicron como protagonista, ha tomado por sorpresa tanto a los trabajadores de la salud como a la población en general.
A esta hora, según voceros de la salud pública madrileña, los servicios hospitalarios están colapsados y los centros de salud sin capacidad de respuesta ante la demanda de atención sanitaria de la ciudadanía. Según la reglamentación, las mascarillas no se exigirán en parques, playas y sitios de deporte al aire libre.