Pese a la cercanía de Carabanchel Alto y de Leganés, el arroyo Butarque todavía se resiste a morir, y ofrece parajes dignos de recorrer. Fue un bosque de ribera antaño, de flora mediterránea que daba cobijo a una fauna silvestre de lagartos, culebras, conejos, liebres y zorros, aunque ya no se ven estos últimos desgraciadamente.
Aquí, en el buen tiempo, aparte de las chicharras, cruzan el aire numerosas aves y las charcas esconden peces y ranas abundantes. Quedan restos de viejos molinos todavía y algún chiringuito, pero como es de suponer se ha perdido en el lugar el esplendor de antaño.
El arroyo Butarque pertenecía a Leganés, pero está a tiro de piedra de Carabanchel Alto. El lugar es digno de visitarlo todavía, y tiene arboledas rodeando un lago en el que hay pescadores, y aquí se respira tranquilidad. Además se puede aparcar el coche cerca del lugar referido.
Con permiso de Leganés,
es el arroyo Butarque
paladín de Carabanchel.
Tiene chicharras también
que “amenizan” tenazmente,
pues el calor les va bien.
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