La vacuna suele tardar entre su creación y su producción cerca de una década en condiciones normales en el mejor de los casos.
La crisis sanitaria producto del COVID-19 por lo pronto no tiene fin. El pasado sábado los datos proporcionados al respecto por el gobierno se muestran alentadores aunque recalcan que se tiene que “ser muy prudentes”. Datos esperanzadores que vislumbran la recta final del proceso de desescalada nacional.
Según la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por su siglas en ingles) el desarrollo de una Vacuna para el COVID-19 en plena normalidad podría tardar entre cinco o diez años aproximadamente. La Agencia subraya que “en el mejor de los casos” se habrá desarrollado la vacuna en un año, a principios de 2021 tomando como punto de partida un año desde que comenzara la epidemia en China.
Pero el mundo a pesar de la pandemia y el confinamiento obligado sigue moviéndose. Investigaciones muy avanzadas aseguran que la esperada vacuna estaría lista para septiembre 2021 según una publicación de la Universidad de Oxford semanas atrás. Marco Cavaleri, jefe del departamento de vacunas de la EMA se ha mostrado escéptico al respecto aunque señalo que están haciendo todo lo posible para acelerar su desarrollo.
Si bien algunos expertos han propuesto agilizar el proceso para que la vacuna quede exenta de ciertas pruebas clínicas, Cavaleri aseguró que la EMA no está contemplando esta opción. “Nuestra estrategia actual es que todas las vacunas en desarrollo deben ser sometidas a amplios ensayos, para determinar cuál es su nivel de protección”, explicó.
La Agencia también está analizando hasta 115 tratamientos para el coronavirus. Alguno de ellos, ha dicho Cavaleri, podrá ser aprobado en Europa a principios del verano. Pero no ha especificado cuáles de ellos. Entretanto la pandemia sigue propagándose por el mundo en su interminable búsqueda de víctimas.
Asimismo por el mundo decenas de equipos científicos de diferentes países trabajan aceleradamente intentando encontrar una vacuna que pueda poner el punto final a la pandemia del coronavirus. La velocidad con que se están llevando a cabo las investigaciones, afirman los expertos, es extraordinaria .De muestra un solo ejemplo la vacuna del Ebola tardo 16 años en su desarrollo es decir; desde su creación hasta su aprobación reciente.
Sin embargo existe un desafío que pondrá al mundo en movimiento: la producción masiva de la vacuna. Un hecho que conlleva efectos colaterales importantes como la producción y distribución de miles de millones de dosis de inoculación ¿Quién o quienes lo harán? Una pregunta que encierra en si misma muchas dudas y ninguna certeza.
Por el momento pese a los anuncios como el del presidente de los EE.UU son simplemente especulaciones, se conoce que existen seis vacunas que ya se están probando en seres humanos, un desafío que la especie humana enfrentara y agradecerá de antemano, aunque ya se especula sobre el costo de la misma algo que no parece preocupar a nadie por el momento, pero la salud y la vida tiene un precio que el capitalismo rancio y oportunista no dejara pasar así nomas.
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