El Real Conservatorio Profesional de Danza ‘Mariemma’ es un ‘tesoro oculto’ de la Finca de Vista Alegre

ROBERTO BLANCO TOMÁS

La Finca de Vista Alegre alberga auténticos tesoros, y muchos de ellos permanecen “ocultos” para la mayoría de los vecinos. Un excelente ejemplo lo constituye el Real Conservatorio Profesional de Danza “Mariemma” (RCPD), un centro de alto rendimiento y gran prestigio a nivel nacional e internacional, al que acuden alumnos de toda España e incluso del extranjero.

Su origen se remonta al primer tercio del siglo XIX, el  15 de julio de 1830, cuando se crea el Real Conservatorio de Música de María Cristina. Desde entonces hasta nuestros días, ha conseguido posicionarse en vanguardia de las enseñanzas de danza en España. Tras pasar por distintas sedes a lo largo de casi dos siglos, en septiembre de 2016 se traslada a uno de los edificios históricos de la Finca de Vista Alegre.

El RCPD pertenece a la Consejería de Educación, Juventud y Deporte de la Comunidad de Madrid. Las enseñanzas que en él se imparten abarcan diez años, divididos en dos etapas: las Enseñanzas Elementales de Danza (cuatro cursos) y las Enseñanzas Profesionales de Danza (seis). A cada una de ellas se accede a través de una prueba específica. En las Elementales se ofrecen dos itinerarios: una Opción Común que prepara para las Profesionales en general, y otra orientada a la Danza Clásica.

En las profesionales hay tres especialidades: Danza Clásica, Danza Española y Danza Contemporánea. “En este centro contamos con las tres, lo que explica la afluencia de alumnos de todas partes, además de nuestro reconocido prestigio”, apunta Arantxa Carmona, directora del conservatorio. Éste cuenta con 66 profesores y 409 alumnos matriculados: 147 en Elementales y 262 en Profesionales. “En general el alumnado se caracteriza por ser muy exigente y disciplinado, con aptitudes y voluntad para dedicarse a la danza”, nos explica Soledad Gil, psicóloga del conservatorio. Continúa la directora: “el objetivo en las Elementales es el acercamiento a la danza, y lo importante en los alumnos es que les guste y que tengan motivación por venir.

Evidentemente no hablamos de un hobby: esto es para aprender danza de verdad, de la mejor manera y en el mejor sitio. En las Profesionales ya sí hay un objetivo profesionalizador, y lo que hacemos en ellas es sacar bailarines del máximo nivel. Normalmente nuestros alumnos están trabajando en las mejores compañías, así que en ese aspecto somos muy afortunados”.

‘Un centro vivo’

A Arantxa le brillan los ojos al hablar del RCPD: “Es un centro muy vivo, que tiene multitud de actividades, Jornadas Interartísticas, proyectos de creación tanto a nivel nacional como internacional…”. También insiste en alejar posibles temores: “el acceso a las Elementales es más sencillo de lo que pueda parecer: hay una prueba, pero no es compleja. Luego, una vez dentro, se intenta que los niños y niñas puedan compaginar esto de la mejor forma posible con sus estudios”.

Las Enseñanzas Elementales se imparten por las tardes, tres días en semana; y las Profesionales se solapan con la ESO, existiendo un convenio con el Instituto Cervantes, en Embajadores. Por la mañana los alumnos acuden al RCPD, y por la tarde van al instituto. Tienen algunas asignaturas convalidadas, como Música, Educación Física y las optativas, pero para ello tienen que aprobar en el conservatorio.

Para terminar, la directora nos expone tres objetivos en los que el centro tiene puesto su punto de mira. En primer lugar, mantener el prestigio de la institución, algo siempre presente. En segundo lugar, “darnos a conocer en el Distrito”, objetivo al que se orientan iniciativas como los Martes con nuestros mayores, que reseñábamos en diciembre, serie de visitas programadas de los centros de mayores y de día que quieran conocer el conservatorio. En este sentido, Carmona insiste en que el centro estará encantado de recibir a todas aquellas personas y colectivos interesados en descubrir este recurso de auténtico lujo con que contamos en Carabanchel (contacto en recuadro adjunto).

Y finalmente, una reclamación que responde a una necesidad: la posibilidad de crear un espacio escénico multidisciplinar en los terrenos sin construcción. Y es que “una cosa es un aula y otra un espacio escénico. Si formamos profesionales y queremos hacerlo en condiciones reales, necesitamos un escenario de verdad, lo más cercano posible a lo que es un teatro”. Que tome nota quien corresponda, pues no es inteligente escatimar cuando se tiene la suerte de contar con un recurso como el Real Conservatorio Profesional de Danza “Mariemma”.

Un AMPA ‘diferente’

El del conservatorio es un AMPA “diferente”, nos cuentan Maricarmen Montero, su actual presidenta, y Raquel Velasco, que lo ha sido durante diez años. Ambas coinciden en que en este centro, por sus características, hay que hacer bastantes más cosas que en un AMPA normal. Podemos resumirlo en que, dado el compromiso que estas enseñanzas requieren tanto por parte de los alumnos como de los padres, la asociación vela sobre todo por los intereses de los alumnos y del conservatorio. Como asevera Raquel, “si a los alumnos y al conservatorio les va bien, a los padres les irá bien”.

Así, el AMPA llega donde el conservatorio no puede, “desde dar becas o proporcionar uniformes a los chavales que necesitan ayuda a incluso dar a los padres ‘terapia’ cuando lo necesitan, porque esto puede ser muy absorbente también para ellos.

Programamos salidas a teatros para que los niños vean en directo lo que es la danza y colaboramos en la organización de espectáculos de los propios alumnos, por ejemplo las jornadas de formación de nuevo público, orientadas a que alumnos de colegios e institutos puedan ver actuar a los nuestros y descubran la danza”. Continúa Maricarmen: “otra cosa que hacemos es la gestión de la ruta: los chavales de Profesional acaban aquí a las 14:30, comen corriendo en el comedor y a las 16:00 empieza el instituto. Si van por sus medios no llegan, así que hay una ruta que por las mañanas sale de Embajadores para los que los padres no pueden traer, y luego a las 15:30 salen de aquí hacia el instituto.

También gestionamos las familias de acogida, porque aquí vienen chavales de toda España e incluso de fuera. Tenemos una base de datos con las familias que tienen un espacio y están dispuestas a tener un niño en casa durante todo el curso y tratarle como un hijo más”.

Como se puede ver, “implicación” sería la palabra que mejor define la relación de las familias con el centro. “Esto no es un hobby o una actividad extraescolar: es un centro de excelencia, donde los alumnos son excelentes, los maestros son excelentes y el AMPA es excelente”, concluye Raquel con sonrisa satisfecha.

Información y contacto: C/ Padre Amigó, 5 (en la Finca de Vista Alegre). rcpd.colegios@gmail.com  - www.rcpd-mariemma.es